Un año más nos juntamos para conmemorar y reivindicar los derechos del colectivo LGTBI+, derechos humanos, que en nada difieren con el resto de las personas que gozan de ellos y que a día de hoy no nos son otorgados.
Toda persona tiene derecho a vivir en libertad, entre otras cosas a amar libremente a alguien de su mismo sexo, o a elegir la opción de género con la que se sienta a gusto. Desgraciadamente, la historia LGTBI+ está marcada por acontecimientos violentos hacia nuestro colectivo por expresar nuestro amor públicamente, sin barreras.
Desde hace poco, sale a la palestra el término ‘delitos de odio’, agresiones a personas por su orientación sexual o identidad de género. El pasado año se vieron registrados 1.285 delitos de odio en España, teniendo en cuenta que la mayoría de las víctimas no denuncia por diversos motivos, entre ellos el desconocimiento o el miedo.
Ahí está la clave, el colectivo LGTBI+ no puede seguir viviendo con miedo, denunciemos, indignémonos, mostrémonos, porque el miedo les hace fuertes a ellos no a nosotras y nosotros, porque delito es la violencia hacia el prójimo, no el amor. Porque seremos realmente libres cuando tengamos los mismos derechos que las demás personas y aún queda mucho por hacer.